sábado, 28 de noviembre de 2009

Poesía a María Auxiliadora leida en la bajada del 2002

Cada año hay un mayo,
casa mayo una novena
y casa Noven un día
para encontrarla en la puerta,
de pie esperando al hijo
que en mayo siempre regresa.
Ha dicho en la porteria
que dejen la puerta abierta
y las luces encendidas
por si es de noche y despierta,
se ha quedado con su niño
esperando en la cancela.
Que esto es Morón y es mayo
y comenzó la novena
y cada novena tiene
un relente de azucenas,
un revuelo de palomas,
una guilnarda de fiestas,
un susurro en la capilla,
un repique en la azotea
y un estruendo de cohetes
asustando a las cigüeñas.
Por eso siempre habrá un mayo
y siempre habrá una novena,
y en cada novena un día,
que por lejos que estuvierá
nunca olvidaré Morón,
ni ese aroma de azucenas,
ni el zurear de palomas,
ni esa música de fiesta,
ni el rumor de la capilla,
ni el blanco de mi azotea,
ni a don Honorio y sus cohetes,
austando a las cigüeñas.
La torre de mi colegio,
es mi camino de vuelta
y por más tiempo que pase,
por más distancias que hubiera,
yo sé que en Marquesa de Sales,
mi casa nunca se cierra,
porque en ella está mi Madre,
vuelva a la hora que vuelva,
de pie con su niño
eserandome en la puerta.

lunes, 9 de noviembre de 2009

DON BOSCO Y MARIA AUXILIADORA MADRE DE LA IGLESIA



Cuadro de María Auxiliadora, que pintó el artista Tomás Lorenzone a pedido de San Juan Bosco para la Basílica de Turín. En el centro está la Virgen María y en sus brazos el niño Jesús con los brazos abiertos . Alrededor de la Madre de Dios están los doce apóstoles y los evangelistas. Algunos apóstoles tienen en su mano el instrumento con que los martirizaron o algún símbolo que los identifique. Al centro de pie está San Pedro (apóstol) con las llaves del paraíso y San Pablo con la espada, rodeándolos los cuatro evangelistas, San Juan (apóstol) con la copa de veneno y el águila, San Marcos sentado sobre un león, San Lucas sentado sobre un buey y San Mateo (apóstol) con el ángel; al lado derecho de la Virgen los apóstoles Santo Tomás con la lanza, San Bartolomé con el puñal, San Matías (que reemplazó a Judas Iscariote) y San Simón; y al lado izquierdo los demás apóstoles, San Santiago el Mayor, San Felipe, San Andrés con la cruz en forma de X, San Judas Tadeo con el hacha y San Santiago el Menor. Sobre la cabeza de la Virgen, en un mar de luz está la paloma que simboliza al Espíritu Santo, y el Ojo que significa el Padre Celestial. Un coro de ángeles rodean a Nuestra Señora y en el fondo inferior se alcanza a ver el retrato del templo de Turín y la montaña de Superga, a cuyo templo mariano iba tantas veces en peregrinación Don Bosco. Este cuadro tiene siete metros de alto y se ubica en el altar mayor de la Basílica de María Auxiliadora en Turín- Italia. Llama la atención el gran manto que cubre a la Virgen, el cual fue pintado así por deseo expreso de Don Bosco: "Para que muchas almas puedan sujetarse de él y sean salvadas".